Ahorrar en electricidad es posible sin reducir el confort

De un tiempo a esta parte, los consumidores han venido experimentando un aumento en el recibo de la luz y los importes a pagar se han vuelto en muchos casos desorbitados. No es raro que los usuarios siempre busquen nuevas maneras de conseguir un ahorro energético, reducir el consumo de la vivienda e intentar de esta manera pagar un poquito menos.

Paneles de energía solar térmica con tubos de vacío, para producción de agua caliente sanitaria, calentamiento de piscina y apoyo a calefacción por suelo radiante en Galicia. Foto: Certo Xornal (Flickr)

Técnicas para ahorrar en la luz

¿La tarifa que tiene contratada el clientes es la más adecuada? Esa sería la primera pregunta que tendría que plantearse y comprobar si es cierto. En Internet, existen varios comparadores de luz que buscarán las tarifas más económicas y podrá compararla con la que tiene actualmente. Este sistema también funciona para todas aquellas personas que quieran dar de alta la luz, ya que siempre pondrá a disposición del consumidor, la oferta más barata en el mercado.

No todos los usuarios tienen la misma tarifa sino que pueden tener otras modalidades como son la “discriminación horaria”. Este tipo de tarifa es muy conveniente para aquellas personas que realizan un mayor consumo eléctrico por la noche, siendo el precio del kilovatio hora (kWh) más barato que por el día y consiguiendo una rebaja en la factura. Se advierte que es recomendable realizar más de un 33%  del consumo durante las horas más baratas o la tarifa será contraproducente.

Otro aspecto que eleva la factura de la luz es la potencia eléctrica que se ha contratado con la compañía. El término de potencia es aquel que indica cuántos aparatos eléctricos se pueden tener conectados a un mismo tiempo y se conoce como la parte fija del recibo de luz. Muchos consumidores tienen una potencia elevada, siendo excesiva para la vivienda y se aconseja reducirla para ahorrar en electricidad. Una simple llamada a la compañía solucionará este problema, pero además se puede buscar una mejor tarifa, a la vez que se disminuye el término.

Por último, consumir menos en la vivienda supondrá un ahorro importante, que el usuario debe tener en cuenta. Para ello, se pueden tomar varias medidas para reducirlo y evitar tener que pagar demasiado por la luz. Entre esas técnicas de ahorro energético están las siguientes:

• Cambiar las bombillas por aquellas que son de bajo consumo o LED.
• No mantener los electrodomésticos en “stand by”.
• Utilizar el calor residual de la cocina para terminar de calentar la comida.
• Apagar el ordenador cuando no sea necesario al igual que el resto de aparatos conectados a él.
• Si el usuario tiene calefacción eléctrica, lo recomendable sería utilizar termostatos o temporizadores, que ayudarán a reducir el consumo.

¿Por qué utilizar energías renovables?

Algunos consumidores buscan no solo el ahorro energético sino también ser más respetuosos con el medio ambiente. Cada vez son más las compañías renovables que ofrecen sus servicios a los usuarios, brindando precios más competitivos y que pueden ser una opción que no se debe obviar. Entre las energías más utilizadas podemos encontrar las siguientes:

• Energía solar.
• Energía eólica.
• Energía hidráulica.
• Energía marina.
• Energía Geotérmica.

Las energías renovables están aumentando su presencia en el sector eléctrico, convirtiéndose en una opción factible para los consumidores y además respetando el planeta. Es una opción que todas las personas deben tener presente, ya que podrían ahorrar y proteger la naturaleza al mismo tiempo.

Artículo expresamente redactado para El Blog de la Energía Sostenible.